Día 40: De hipsterlandia a poserlandia en un día

Este fin de semana fue el mercado de Motores en el Museo del Ferrocarril cerca del Metro Delicias. Este mercado yo mejor lo definiría como Hipsterlandia: una tierra llena de hombres barbudos, vegetarianos, chicas vestidas como viejitas y llenas de tatuajes (*¬*), veganos y cosas mas viejas que yo (y que claramente puedo conseguir en un basurero) a un precio desorbitante.

Trenes

¿Huacales?

¡Ciudades!

Cositas

Musica

Cabezas de animales- 30 E

Más cosas

Libros

Una grua y más música

Había muchos puestos de libros y cosas bien poco mainstreams, cabezas de animales hechas de papel mache por 30 E, plantas en latas de chiles por 15 E, libros por 1 E (eso si me hizo feliz) ropa vieja, mesas hechas de puertas viejas, fotografías, cosas 'vintage', cámaras analógicas y más cosas por el estilo (Como una Condesa, pero más cara) Yo hubiera seguido vagando más rato, viendo pero sin comprar, como debe de ser, pero Javier se aburrió (creo que no le gustan las hipsters) ¡Oh! ¡Eso me recuerda una canción de Mongosaurio!

¡Uuuuuhhhh! ¡Me gustan las hipsters!

Ok. Ya paso mi momento de... momento raro. 

Como sea. Después de un rato Javier se aburrió y sugerí ir al Parque Quinta de Molinos a ver los almendros en flor. Y de verdad, se ven excesivamente bonitos :3 Me hizo tener una vez más pensamientos extremadamente cursis u_u que vergonzoso, me temo que se esta volviendo crónico :( Pero he aquí la evidencia fotográfica de mi momento abajo de los almendros.

 Comimos en un restaurante chino, muy barato pero mi pollo al Curry de Curry no tenia nada y dudo que fuera pollo. Al menos no me hizo daño, lo cual fue muy bueno. El parque es relativamente pequeño (Todo es pequeño en comparación de Casa de Campo). ¡Era un día tan bonito, soleado y con poco viento! Montones de familias, viejitos, parejitas, niños y grupos de amigos organizaban pequeños picnics debajo de los árboles de almendros. Nos sentamos un rato y me puse a enseñarle a jugar Pokemon y nuestra conversación vario desde la intolerancia a la lactosa hasta porque la caca no cuaja (Daniel entenderá.

Al final, nuevamente se aburrió y decidimos movernos. Me comentó que quería ir al Río, cerca del Metro Pirámides en la Línea 5 cerca del Metro Casa de Campo. Ibamos hacia allá tan felizmente ya en el Metro, cuando notamos un incremento en la densidad poblacional de metalros. De pronto aparecieron montones de hombres de cabello largo (¡¡Andyyyyyy!!)), gente vestida de negro con cadenas y perforaciones y tatuajes. 

Cuando nos bajamos del metro, apenas ibamos a salir cuando gracias a mi super conexión de internet en mi super chafisima celular -un día lo voy a aventar por la ventana, lo juro- averiguamos lo que pasaba. Ese día, a las 8:00 de la noche Scorpions tocaba en la ciudad. Lo siguiente que super es que nuevamente estabamos en el metro e ibamos corriendo a Metro Vistalegre y de pronto estabamos acosando revendedores para conseguir boletos. Y si... Nidia fue a ver a Scorpions. Que poser me senti u_u pero despues, ya en el concierto me di cuenta de que todo el público eran bien posers y que solo se emocionaron en las 3 más conocidas 'I'm still loving you', 'Rock you like a hurricane' y 'Winds of change'

Mi personal momento de felicidad

Javier con su cara de felicidad ¡Ja!

 Y ya. Salimos a las 11 30 y yo me dormi hasta la 1 de la mañana. Lista para al día siguiente ir al Escorial.